
Denisa Elena Roman
Mi nombre es Denisa Elena Román, nací el 21 de febrero de 1991 en Pitesti-Valaquia. Pasé mi infancia y parte de la adolescencia en mi tierra, una tierra histórica y bonita, por cierto.
A temprana edad, con 15 años llegué a Zaragoza, noble ciudad del cierzo, con la falsa idea de permanecer una corta temporada y resulta que llevo casi media vida aquí, ya que su gente, sus costumbres me han acogido con bondad y cariño. Una vez instalada como cualquier otra adolescente, continué con mis estudios, hice mis primeras amistades, descubrí mis pasiones y conocí el amor. El mayor aprendizaje fue la toma de conciencia que realicé de lo guerrera y fuerte que se puede llegar a ser, con valor y coraje para enfrentarme a todos los retos y obstáculos que el día a día me traían. Esa fuerza, ganas y voluntad de querer superarme se lo debo a mi madre, ella me demostró y enseñó como no hay límites más los que uno se quiera autoimponer. Sus valores sobre la vida y el porqué de las situaciones que hemos de afrontar me han convertido en la persona que soy, ¡gracias mamá!
Mis primeras inquietudes personales y académicas las pude desarrollar disfrutando mucho del momento; acabé mis estudios de secundaria, me formé profesionalmente como peluquera, técnico en educación infantil y educación especial. Al mismo tiempo, y por satisfacción personal, me formé como modelo, posando y desfilando para algunas campañas. Debido a mi pasión por el deporte me formé como monitora de actividades físicas también. Por medio de mi formación y por medio de la experiencia que fui adquiriendo descubrí lo que realmente me hacía vibrar en mi corazón, y es la seguridad, tanto de los demás como la mía propia.
Me apasiona la gente genuina y con magia, las pequeñas cosas que hacen grandes los momentos, me hechiza el sonido de la guitarra flamenca, hace que me traslade a lugares inalcanzables, me gusta perderme para poder encontrarme en ocasiones, también hace poco descubrí otra gran pasión, los deportes de contacto, en concreto el boxeo, que comenzó como un juego, un pasatiempo y que cada vez tomé más en serio y eso gracias a mis entrenadores, Miguel Ángel Peña y Joan Pintor del CBZ(Club Boxeo Zaragoza)y mis compañeros, también fue allí donde se despertaron sentimientos que llevaban años dormidos, que jamás pensé encontrar en un lugar así, y escribir, escribiendo libero mi alma.
Soy feliz con mi vida y me gusta soñar con los ojos abiertos. Soy una persona muy inquieta, quizás con mucha energía y me encanta aprender y descubrir algo nuevo cada día, mi trayecto por la vida no ha sido fácil, tengo recuerdos clavados en el alma que no son fáciles de borrar, es como cuando arrugas una hoja de papel y la vuelves a estirar, siempre quedan marcas. A pesar de todo, me siento orgullosa de poder llevar una vida sencilla y tranquila.
Doy las gracias a la vida, tanto a los duros momentos que tanto me han servido para poder ser la persona que soy hoy en día, como por los momentos dulces que me brinda. Mi madre es mi heroína, mi amiga y mi confidente. Me siento muy feliz conmigo misma, me hallo en un punto donde arriesgarse ha convertido en mi plan, no más silencios, ya no callo lo que llevo dentro, ahora me arriesgo y expreso sin temor. Me hice valiente aquel día que sentí esa emoción fuerte en el pecho por alguien, por algo.